lunes, 20 de julio de 2015

Hoy duele, hoy lloro

Hoy mi amiga que se quedó embarazada justo cuándo yo empezaba mi preparación para la última transferencia, me ha enviado un mensaje: estoy en el gine y al parecer ya estoy dilatando, así que me quedaré ingresada...
 
Recuerdo cuándo me dijo que estaba embarazada y yo me dije, la siguiente soy yo, lo sé, y cuándo me quedé embarazada y ella estaría de 3 o 4 meses, me moría de ganas de decirle que yo también estaba embarazada cómo ella y poder vivir juntas nuestro embarazo. Pero no ha sido así, de hecho es otra de las amigas que pasa a la lista, cada vez más larga, de amigas que se embarazan y tienen a sus bebés antes que yo.

Ahora agradezco el haber sido cautos y no haber dicho nada, pues ningún amigo sabe nuestra historia y es un alivio. Por consejo de nuestra doctora nos esperábamos a los 3 meses para hacerlo público y no pudimos llegar a hacerlo. De hecho no pudimos ni decírselo a mis suegros ya que estaban fuera esos días y mi chico se lo quería decir en persona y al final como el resultado fue el que ya conocéis pues nos planteamos no decirles nada, pues queríamos ahorrarles el dolor.
 
Es una alivio que mi amiga no sepa nada pues en este caso, seguro que mi amiga el día que yo vaya a conocer a su nena se sentiría mal por saber lo que a mi me pasó y pensaría que para mi en lugar de una alegría el estar ahí con su bebé en mis brazos me recordaría a mi pérdida.

Y claro que es así...claro que lo pensamos, claro que nos duele, claro que contamos los años que llevamos en esto sin tener todavía a nuestro bebé en brazos, claro que hacemos cuentas de cuántos años tendrían nuestros hijos o cuántos hijos tendríamos ya si todo hubiera ido bien...pero no lo podemos evitar, tenemos que vivir con ello lo mejor que podemos. 
Nuestras amigas, nuestras primas, cuñadas o hermanas no tienen la culpa de ser tan afortunadas ni de que nosotras no lo seamos...y yo decidí hace tiempo que no iba a dejar de disfrutar de mis sobrinos o de los nanos de mis amigos por el hecho de que me recordaran a nuestro problema, y aunque hay veces que cuesta y otras duele, lo intento, intento disfrutar de ellos.

Pero hoy estoy algo triste, este mensaje me ha hecho conectar con el pasado, con mi pérdida y con la parte triste del presente que cuesta tanto mantener alejada...hoy me alegro en el alma por mi amiga pero siento envidia, y me da rabia pensar que todavía no sé cuándo podré vivir yo ese momento...ni siquiera sé si lo viviré. Y es que antes de mi embarazo estaba optimista, me daba igual estar en mi primera beta negativa que en la cuarta, yo me reponía enseguida y tenía claro que lo íbamos a conseguir, pero después de la pérdida de mis chiquitines, después de la decepción tan grande y después del enorme golpe parece que haya dejado de creer un poquito, parece que he perdido un poco la esperanza y a veces, de tarde en tarde, se me pasa por la mente la idea de que puede que no lo consiga nunca y eso antes no me pasaba, no lo pensaba. Y aunque es de tarde en tarde esa idea me crea mucha ansiedad, ansiedad que se une a la idea de no tener todavía claro el plan a seguir...

Hoy me duele mucho mi herida...

Hoy estoy llorando...

Un beso fuerte.
Memole triste.

4 comentarios:

  1. Es normal que te sientas tan triste... pero tienes que coger fuerzas porque seguro que lo vas a conseguir, no tires la toalla.... El otro dia encontre una frase que me falta estamparmela en la cara para leerla cada vez que me da bajon, dice "No te rindas nunca, porque nunca sabes si el proximo intento es el que funicionara" la encontre por casualidad y es mi mantra en estos momentos.
    Un abrazo muy muy muy gordo!! Animo

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  2. Una cosa que me dijo mi ginecóloga fue que si me había quedado embarazada 2 veces con mis óvulos con la donación, quizás no sería a la primera, pero que si mi mente era fuerte y no tiraba la toalla me aseguraba que tendría a mi bebé. La psicóloga también me dijo que las personas que acaban sin hijos después de someterse a reproducción asistida con la mente abierta (es decir, sin descartar la donación) es en el 99.9% de las veces por 2 motivos: falta de recursos económicos o cansancio mental.

    Hoy llora lo que necesites y mañana levántate y lucha!!!

    Bsssss

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  3. Memole, preciosa, hasta para llorar tenemos que ser valientes. Me siento muy representada en tus palabras. Pero por lo que suelo leer de tu blog, esta tristeza durará un ratito. Como esos aguaceros que limpian el aire y lo dejan suave y calmo.
    Un abrazo fuerte.

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  4. Hola Memole! No conocía tu historia y me ha sobrecogido muchísimo. Solamente puedo decirte que te concedas el privilegio de llorar todo lo que necesites y de tener los sentimientos que te salgan. Este camino es demasiado duro como para reprimir nuestras emociones.

    Desde un rinconcito del Mediterráneo te mando un abrazo lleno de cariño y de mucha fuerza compañera.

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