Como no, tuve que esperar bastante, ya sabemos que mi doctora se retrasa bastante de la hora que te dan. Así que la espera fue horrible pero al final nos tocó.
Pasamos y entró primero un doctor nuevo que hay en la clínica al que Juana parece que le está enseñando. Me dijo que pasara y que ahora vendría Juana. Menos mal!! Pues yo quería que fuera Juana y al principio pensé que me atendería solo él.
Me empezó a hacer la eco y enseguida vi en la pantalla un solo saquito. Me puse un poco triste, pues yo siempre había dado por hecho que iban a ser dos...
El Doctor estaba callado mirando y mirando el saquito, pero no decía nada. Amore me cogió de la mano pues también estaba nervioso y no sabíamos que pasaba. Al final le dije: o me dice algo o me muero de un infarto!!
Pero tampoco sirvió de mucho...dijo, aquí está el saquito y lo empezó a medir y remedir...y otra vez en silencio....
Y cuando yo ya me quería morir entró Juana y me sonrió y cogió el ecografo y dijo, muy bien, el saquito está muy bien colocado...y tiene un buen tamaño...y yo suspiré...y amore y yo nos miramos un poquito más tranquilos. Menudo susto leche!!
Le comenté que me preocupaba si el otro renacuajo estaba en algún sitio mal colocado dado los dolores y molestias que notaba y me dijo transmitiendo tranquilidad que ahora nos asegurábamos de que no estaba en ningún sitio que no tuviera que estar...me miró los ovarios, revisó el utero y volvió a mirar mi saquito. Me dijo que estaba todo bien, que uno era lo natural y que ponian 2 para que se quedara 1. Así que era un éxito.
Yo estaba muy feliz, me daba un poquito de pena porque todos estos días había pensado siempre en plural y la beta era alta, 650, por eso me costaba un poquito asumirlo. Pero bueno, igual que me costaba asumir que se había quedado mi lentejita junto a mí. En esta lucha, cuesta tanto de asumir las cosas, a veces incluso parece que asumes más fácilmente las cosas malas que las buenas...
Así que ahí estábamos amore y yo, radiantes de felicidad, llorando de la emoción y de la tensión acumulada y como no, viviendo el momento con cautela, como un poco de lejos, no sea cosa que no sea nuestro momento y nos tomemos privilegios que no debamos.
Pero algo me quería decir en mi interior que sí que era nuestro momento, esta vez sí!!
Y decidimos irnos a celébralo mano a mano a comer, a un sitio que me encanta en la playita a orillas del mar...a reír, a suspirar, a vivir el momento, porque ese momento sí que era real y nuestro y queríamos saborearlo hasta el final.
Memole + 1
Yo estaba muy feliz, me daba un poquito de pena porque todos estos días había pensado siempre en plural y la beta era alta, 650, por eso me costaba un poquito asumirlo. Pero bueno, igual que me costaba asumir que se había quedado mi lentejita junto a mí. En esta lucha, cuesta tanto de asumir las cosas, a veces incluso parece que asumes más fácilmente las cosas malas que las buenas...
Así que ahí estábamos amore y yo, radiantes de felicidad, llorando de la emoción y de la tensión acumulada y como no, viviendo el momento con cautela, como un poco de lejos, no sea cosa que no sea nuestro momento y nos tomemos privilegios que no debamos.
Pero algo me quería decir en mi interior que sí que era nuestro momento, esta vez sí!!
Y decidimos irnos a celébralo mano a mano a comer, a un sitio que me encanta en la playita a orillas del mar...a reír, a suspirar, a vivir el momento, porque ese momento sí que era real y nuestro y queríamos saborearlo hasta el final.
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